viernes, 11 de enero de 2013

Lógica para objetivistas: Meet the Randroids.


Como ya resulta cansino (e incluso aburrido) estar siempre jodiendo con los amigos progresistas y lo equivocados que están, vamos a inaugurar una nueva sección dedicada a un segmento mucho menos conocido, al que yo en particular le estaré siempre agradecido, pero que no deja de estar, en mi humilde opinión, lleno de incongruencias. Me refiero a los randroides, y si no había oído hablar de ellos no se preocupe, que yo se los presento.

Ayn Rand, objetivista y enemiga
natural de los comunistas.
Como probablemente ya sepa el querido lector, Ayn Rand fue una filósofa y escritora defensora del capitalismo más rapaz (de acuerdo a los progresistas), es decir, del capitalismo laissez faire, así como creadora de una filosofía que ella misma nombró objetivismo, y que abarca la metafísica (teoría de la realidad), epistemología (teoría del conocimiento), ética (teoría de la moral), política (teoría de las relaciones humanas) y estética (teoría de la belleza).

Bien, hasta ahí la wikipedia. El caso es que muchos de nosotros tenemos en gran estima a Ayn Rand por su novela más famosa, La Rebelión de Atlas, que ha resultado un texto influyente para muchos al exponer de una manera muy elocuente los vicios del socialismo y la intervención gubernamental. Al final muchos terminamos dando el último paso, que es pensar que si el gobierno no debería estar mosqueando a la gente en lo económico, quizá tampoco tiene derecho alguno a mosquear en lo moral (lo que en última instancia lleva al anarquismo).  Y ahí está todo el problema, porque como probablemente sepan, Ayn Rand nunca fue anarquista, y siempre defendió la existencia de gobiernos (mínimos y voluntarios, pero gobiernos al fin). Y es que por más que se diera aires de objetiva, la señora nunca dejó de ser una radical, y una vez que decidió aferrarse al minarquismo, la perdimos para siempre.

Y perdimos también a muchos objetivistas. Porque es normal dejarse convencer por Ayn Rand y adoptar sus ideas, pero si después de un tiempo sigues estando de acuerdo en todo lo que ella decía, entonces pasas a convertirte en un randroide en toda regla. El objetivismo tiene muchas cosas buenas, sí, pero al final Ayn Rand se equivocó en otras tantas, y en lugar de seguir mejorando su teoría con el tiempo, decidió que era mejor idea simplemente parar en seco y no avanzar más. Y para que nadie fuera a sospechar nada, se llamó objetivista.

Y así como entre los marxistas empezaron a pulular los pubers babosos que desprecian a los ricos, quieren cosas gratis y no saben na' porque realmente no han leído a Marx, también entre los objetivistas fue creciendo una nada despreciable proporción de pubers babosos que desprecian a los pobres y no saben tampoco na' porque nunca leyeron realmente a Ayn Rand. El Urban Dictionary ya lo explica muy bien:

Randroid:

A blind follower of Ayn Rand & her philosophy of objectivism.
Randroids are often selfish rich kids who want to justify being rich and economically conservative, or "classical liberalism" and engaging in illegal activities such as drug use and having sex with underage girls.

Randroids will always say shit like "Is a man not entitled to the sweat of his brow?" regardless of the fact that most of them inherit their wealth as did their fathers, and their fathers before them.

Randroids are never working-class folks getting by paycheck to paycheck, and do not care about such people.

Privatizing everything, from police to schools, is their dream.

To a Randroid, being nice, charitable, altruistic and fair is to be a morally reprehensible person and such things are vices.


Los seguidores ciegos de Ayn Rand, los fanáticos del objetivismo, esos son los randroides. De modo que damos por inaugurada esta sección, y en lo sucesivo nos dedicaremos a discutir las diversas joyas que Ayn Rand dejó como legado intelectual, esperando que a algún randroide le sea útil (que lo dudo).

miércoles, 9 de enero de 2013

Mancera es un genio.



En los últimos días se dieron una serie de asesinatos en el Cerro de la Estrella, en el DF, lo que preocupó sobremanera a los vecinos. Inmediatamente, el gobierno del DF, preocupado por la preocupación, despacho a los cien mejores policías de toda la policía capitalina para dar con los responsables.

- Mira, lucho, por fin llegó la policía a hacerse cargo de esto. Ya era hora.
- Sí, la verdad es que ya estoy más tranquilo, dicen que mandaron a 100 policías y que ya capturaron a los responsables.
- Sí, mira, alla los llevan. Que bueno que ya capturaron a los... ¿perros?

Los presuntos responsables de los recientes homicidios.
Pues sí, perros. En un principio parecería una pésima decisión por parte de Mancera o los servicios de peritaje el perseguir a perros de verdad, pero no lo es. La verdad es que Mancera es un genio que podría revolucionar el sistema de justicia de pies a cabeza, por múltiples razones:

1. Es más práctico: En este país muchas personas terminan en prisión siendo absolutamente inocentes. Una cantidad ridículamente baja de los delincuentes terminan siendo castigados, de modo que, ¿por qué no dejamos ya las apariencias y llenamos las cárceles del país de perros? Los perros son más fáciles de almacenar, requieren menos alimentos, no extorsionan desde prisión, no hay que hacer controles de seguridad excesivos, pero sobre todo, no van a llegar a joder los de derechos humanos. Y los de peta son unos loquillos que nadie pela.

2. Es un golpe mediatico: Capturar a una banda de violadores o asesinos ya no causa sensación, ¿pero qué tal una banda de perros violadores y asesinos? En las redes sociales ya todos hablan de Mancera y su nuevo sistema de justicia, y ya sabes lo que dicen: que te hagan publicidad, aunque sea de la mala.

3. Es más fácil rectificar: Todos sabemos lo vergonzoso que es que después de todo un impecable proceso de investigación y peritaje, resulta que enviaste a prisión a un inocente. Al rato ya lo tienes exigiendo una compensación, haciendo documentales donde habla mal de la policía por un pequeño error en el papeleo, y así. A los perros, en cambio los puedes liberar si es necesario, y ni siquiera te van a pedir el "usted disculpe".

4. Por fin sería rehabilitación social: Aceptemoslo: las prisiones actuales son escuelas del crimen. Entran sabiendo un poquito, salen siendo unos expertos. Pero si la población carcelaria en cuestión esta compuesta por perros, entonces ya podrás presumir de un sistema penitenciario que rehabilita a sus perros en el 99% de los casos, porque ¿apoco no salen bien mansitos? O por lo menos, ya no asesinan. Tampoco es que asesinaran antes de entrar pero... bueno, lo que cuenta son los resultados finales.

5. Justicia pronta y expedita: Va el gobierno y gasta una cantidad absurda del presupuesto en "impartición" de justicia para no impartir justicia en absoluto. Ahora miren a los perros: no pueden defenderse, no pueden contratar abogados,  no van a huir ni se resistirán al arresto, solo necesitas atraparlos, decir "¡Culpable!" y procedes a la reclusión del susodicho. Olvidate de andar pagando magistrados, peritos, jueces, abogados, secretarias, etc, lo único que necesitas es quién dicte las sentencias.

Así, viendo el asunto con cabeza, ¿cual es el problema?

MANCERA SEAL OF APPROVAL.